La saga de Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba está lista para entrar en su clímax definitivo con una trilogía de películas que pondrá punto final a la historia de Tanjiro Kamado y los Cazadores de Demonios. La primera de estas entregas será Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba The Movie: Infinity Castle, un estreno que marca un formato poco convencional en el anime, ya que no habrá más temporadas televisivas y toda la conclusión se desarrollará en la gran pantalla.
El Castillo Infinito, escenario principal de esta película, no es un simple campo de batalla, sino una trampa viviente creada por Muzan Kibutsuji y controlada por Nakime, la demonio de la biwa. Sus pisos móviles, paredes que se distorsionan y una gravedad ilógica convierten este espacio en un laberinto mortal para los héroes. Allí, los Cazadores deberán enfrentarse no solo a los demonios más poderosos que aún quedan en pie, sino también a un entorno hostil que cambia constantemente y juega en su contra.
La amenaza principal es Muzan Kibutsuji, el primer demonio y enemigo más temible de la franquicia. Su objetivo ahora es Nezuko Kamado, quien recientemente superó la debilidad al sol, convirtiéndose en la clave de la inmortalidad que tanto ansía. Esta situación obligará a Tanjiro a luchar sin el apoyo de su hermana por primera vez desde que inició su camino como cazador, aumentando los riesgos de cada enfrentamiento. Al mismo tiempo, los Hashira deberán coordinarse como nunca antes, a pesar de la ausencia de un líder claro tras el sacrificio de la familia Ubuyashiki.
En este arco también cobrarán gran protagonismo las Marcas de Cazador de Demonios, que otorgan un poder superior a quienes las portan. Personajes como Mitsuri Kanroji, Muichiro Tokito y el propio Tanjiro ya han despertado estas habilidades, que serán decisivas en la lucha contra los demonios de Rango Superior. La batalla final pondrá a prueba técnicas como el Hinokami Kagura y la Acción Repetitiva, herramientas vitales para sobrevivir al asedio de Muzan y sus seguidores.
Los villanos restantes elevan la tensión de la historia: Akaza, Doma, Kokushibo y la propia Nakime prometen combates que marcarán a los fans. A diferencia de otros arcos, el Infinity Castle no ofrece espacio para descansos narrativos, sino una sucesión de batallas brutales que anticipan un alto costo para los héroes. La obra de Koyoharu Gotouge nunca ha temido mostrar muertes significativas, y este clímax podría ser el más desgarrador hasta la fecha.
Con el trío de protagonistas —Tanjiro, Zenitsu e Inosuke— atrapados junto a los Hashira en el Castillo Infinito, la trilogía se perfila como un torbellino de acción, tragedia y revelaciones. Demon Slayer: Infinity Castle no solo promete espectaculares combates animados, sino también cerrar con fuerza una de las historias más queridas del anime moderno.
